Propósitos de cualquier mamá

¡Que se llega el nuevo año! Y nosotras queriendo ser mejores en todo, especialmente en la maternidad. Y cómo no si la maternidad ha marcado nuestras vidas como ninguna otra cosa.

Pues bien, como cada vez que nos encontramos en este espacio, esperamos darte tips de utilidad, que tú nos compartas todo lo que nos ayude a crecer y que podamos juntas ser mejores en nuestras misiones. Sin embargo, hoy tengo un objetivo especial, aparte de acompañarte en tu reflexión, deseo hacerte reír.

La razón es simple, para quienes no somos ‘naturalmente risueñas’ debemos saber que nuestros hijos disfrutan al máximo ver reír a mamá… y a veces se desgastan en lograr sacarnos una sonrisa.

Pues bueno entre diferentes propósitos reales e importantes te mostraré que otros que consideramos simples o que son parte de la cara chusca de la maternidad, resulta que tienen un fundamento en el amor… en el escrito verás los fundamentos y en nuestro video reirás compartiendo nuestra maternidad real, puedes ver nuestro video en este link…..

Empecemos con los propósitos.

1. Aprender el nombre de los hijos

Parece broma, pero es un clásico escuchar a una mamá ‘pasar lista’ hasta llegar al nombre que busca. Y según los psicólogos y neurocientíficos de la Universidad norteamericana Duke University, es un mero error cognitivo.

Es decir, los humanos tendemos a hacer grupos de palabras, y en este caso el grupo es por el vínculo creado con nuestros hijos. De este modo podemos decir que el amor de mamá nos ha jugado una mala pasada.

No sé tu, pero yo recuerdo claramente a mi abuela gritar: Lili, Landy, Ale…. Tú la de blusa roja…plop.

2. Dar a los hijos casi todo… pero guardarse algo para sí misma.

Las mamás no solemos ‘dar’ a nuestros hijos, solemos ‘darnos’ y en esas tres pequeñas letras hay una gran diferencia. Una madre es capaz de sacrificarse a si misma, y no hablo necesariamente de grandes sacrificios, también los pequeños cuentan.

Desde el mismo embarazo, una mamá se da a si misma y por más miedo a los piquetes, extiende el brazo cada vez que se pide un estudio para saber que todo marcha bien.

Y ese es el inicio, en verdad una mamá puede hasta dejar unas amadas quesadillas si sospecha que pudieran hacerle daño a su bebé.

Los sacrificios de mamá son innumerables, y algunos heroicos… pero un día, va al oxxo y ve sus galletas favoritas, y se da cuenta que hace mucho no las come, o que hace mucho no las come completas… mmmm

Mamá ha llegado a la etapa de los contrabandos jajaja. No te sientas mal, bienvenida. Somos muchas las que somos parte del club, que de cuando en cuando deseamos un espacio solas, comer algo sin que nos pidan o tomar una ducha sin que nos requieran… y déjame decirte algo importante, eso NO te hace mala madre.

Es la muestra de que tu individualidad sigue viva y te pide que te des un pequeño espacio en ese gran mundo de generosa maternidad.

Distruta esos momentos y tómalos como lo que son, espacios para tomar fuerza y seguir con una maternidad sana, entregada y amorosa.

3, Practicar un deporte

Los reflejos de mamá son impresionantes, en verdad, nunca podremos explicar esa agilidad con la que una madre puede brincar una silla para llegar al suelo y abrazar a su bebé antes de que caiga de algún lugar. O cómo es posible que tenga esa velocidad para enderezarlo antes de que salga reflujo o vómito.

Las mamás decimos no tener tiempo para ejercitarnos y aunque nuestra vida ha cambiado mucho, una caminata diaria nos vendría bien. Seamos honestas, cuando algo es de nuestro interés logramos sacar tiempo.

Me dirijo a las mamás que hemos perdido todo contacto con el deporte, vamos por metas pequeñas… que te parecen 15 minutos de caminata para empezar.

Según los expertos, hay al menos 12 beneficios en caminar a diario, te enumero algunos: mejora circulación, estado de ánimo, alarga la vida, fortalece músculos, mejora circulación y respiración, entre otros.

Yo agregaría, que puede ser una aventura para tu bebé o un paseo de exploración para tus hijos. En el siguiente artículo te daré ideas interesantes de qué hacer mientras caminan.

En el video se ve un deporte ancestral, la chancla voladora jajaja y cabe señalar que ningún niño o chancla salió lastimado durante la grabación.

4. Buscar lugares seguros

De forma graciosa, en el video se ve a una mamá con urgencia de encontrar lugares seguros para guardar su contrabando (para mayores referencias, ver punto 2). Sin embargo, el fundamento real de este propósito radica en dos hechos ciertos:

-Las mamás somos protectoras, apostamos por lo seguro.

-Las mamás podemos encontrar todo.

El primero es indiscutible, y eso obedece a la naturaleza materna, la mamá es la que protege desde el vientre y durante la vida, y es el padre quien suele empujar a los hijos a explorar y buscar más independencia. Aunque también influyen las personalidades de cada quien.

Es real el hecho de que las madres tenemos más probabilidades de encontrar las cosas perdidas, más probabilidades que los hijos e incluso los padres. Recordemos que las mujeres podemos tener la atención distribuida en varios factores a la vez, eso nos da información valiosa para las búsquedas.

Por ejemplo tú y tu esposo pueden estar platicando con unos vecinos, mientras sus pequeños juegan en el jardín. Tu atención diferida logra estar en la charla y en el juego de los niños a la vez y más tarde cuando tu hijo llore por el juguete perdido, tu cerebro te regalará el registro de tu hijo caminando hacia la jardinera del vecino con su juguete en la mano ¡Y voilá! El juguete está atrás de la jardinera.

Otro hecho adicional es que las madres solemos recoger la casa y tener cuenta del lugar de la mayoría de las cosas de todos.

Y así, será siempre y por siempre, las madres y luego abuelas, tenemos la capacidad amorosa de fijarnos de todo, usémosla para el bien jajaja.